El 12 de diciembre, con motivo del Día Internacional de los Derechos Humanos, el Think Tank de Emprendimiento Cooperativo Internacional (ICETT, por sus siglas en inglés) organizó una conversación en línea sobre los derechos humanos en las cadenas de valor. El evento fue una oportunidad para conocer cómo las cooperativas practican y promueven los derechos humanos en todo el mundo.
Las cadenas de valor y las cadenas de suministro son fundamentales a medida que el mundo se recupera de la pandemia, dijo el Director General de la ACI, Bruno Roelants. La declaración de identidad cooperativa elaborada en el seno de la ACI y consagrada en la Recomendación 193 de la OIT sobre la promoción de las cooperativas “incluye principios que involucran inevitablemente a las cooperativas en la cuestión de los derechos humanos”, añadió.
Tarun Bhargava, referente del ICETT y Director General de la Cooperativa de Fertilizantes Agrícolas de la India (IFFCO, por sus siglas en inglés), dijo que el comercio de cooperativa a cooperativa podría desempeñar un gran papel en la construcción de una cadena de valor cooperativa - particularmente después del Covid-19. Como parte de su enfoque de los derechos humanos, IFFCO trabaja para mejorar la vida de vida de los agricultores y promueve el desarrollo cooperativo.
Nina Elomaa, Vicepresidenta Senior de Sostenibilidad en el Grupo S-ryhmä / S en Finlandia, compartió los elementos clave del marco de derechos humanos de la cooperativa, bajo el cual SOK examina las condiciones laborales y evalúa el desempeño de los proveedores a través de auditorías de terceros. En 2019, el minorista encargó a un tercero que realizara una evaluación a fondo de los derechos humanos de su cadena de suministro de tomates en Italia. La investigación encontró elementos de trabajo forzoso, malas condiciones de vivienda y horarios de trabajo excesivos.
Como cooperativa, por si sola, SOK tiene limitaciones en respecto a lo que puede hacer para abordar los problemas por su cuenta, dijo la Sra. Elomaa. El minorista con el que trabajan tratará de participar en los esfuerzos de promoción de canales de contratación legales para los trabajadores migrantes y seguirá escuchando a los trabajadores y capacitando y supervisando a los proveedores y colaborando con ellos. En otros países europeos se plantean cuestiones similares, por lo que “se necesita una colaboración internacional para abordar la cuestión”, añadió la Sra. Elomaa.
Rosita Zilli, Secretaria General Adjunta de Euro Coop, destacó otros ejemplos mostrando soluciones pioneras de los minoristas europeos, algunos de los cuales figuraban en un documento sobre los derechos humanos en las cadenas de suministro publicado por Euro Coop en 2018 (https://www.eurocoop.coop/news/246-Human-Rights-and-Supply-Chains-A-Consumer-Co-operative-Contribution.html) .
Por ejemplo, en 2017, Coop Italia lanzó su campaña "Good and Fair" para fomentar la ética en las cadenas de suministro de alimentos consideradas peligrosas. Como parte de ello, pidió a los proveedores que se comprometieran a realizar controles a sus asociados. A través de otro programa, Coop Origine, permite a los consumidores verificar el origen y los principales ingredientes de cada producto. Coop Italia también dirige su línea de comercio justo de marca propia.
En el Reino Unido, el Grupo Coop ha adoptado un enfoque similar a través de su Política de Comercio Ético y Derechos Humanos, el Código de Conducta de Compras Sostenibles, la Política de Compras y Proveedores Sostenibles y la Política de Derechos Humanos y Comercio. El Grupo también ha hecho una activa campaña contra la esclavitud moderna y ofrece prácticas laborales remuneradas.
Asimismo, Coop Noruega, miembro fundador de la “Iniciativa de Comercio Ético”, ha elaborado un Código de Conducta a través de Coop Trading que exige auditorías de terceros para los proveedores de los países de riesgo. Si bien estos logros colocan a las cooperativas en la vanguardia de la lucha contra los abusos, se podría hacer más, argumentó la Sra. Zilli. "Es posible construir sobre lo que ya existe", añadió.
Annegret Brauss, Oficial Adjunta de Programas del Centro de Comercio Internacional, explicó cómo, al promover una mayor inclusión y sostenibilidad, las cooperativas podrían: aumentar los volúmenes y mejorar la calidad; hacer que sus cadenas de suministro sean sostenibles a largo plazo; mejorar la retención de los trabajadores y la productividad; fortalecer la gobernanza a través de un liderazgo diverso; e impulsar su reputación y las oportunidades de mercado. Lea nuestra entrevista en profundidad con los expertos del ITC aquí.
Fabienne Yver, Coordinadora de Proyectos de la Oficina de Defensa del Comercio Justo (FTAO, por sus siglas en inglés), examinó los derechos humanos en las cadenas de valor desde la perspectiva de las cooperativas de productores de comercio justo. En un informe encargado por la FAO se llegó a la conclusión de que “las cooperativas de pequeños agricultores necesitan recursos y condiciones adecuadas para cumplir con la debida diligencia en materia de derechos humanos (human rights due diligence HRDD- por sus siglas en inglés”.
Sin embargo, si bien los planes de sostenibilidad como el comercio justo pueden ofrecer apoyo a la labor de HRDD de las empresas, “los trabajadores y las cooperativas de pequeños agricultores, no pueden eximir a las empresas de sus responsabilidades en materia de HRDD”, advirtió la Sra. Yver.
Andrea Dávila, Oficial Técnico del Departamento de Empresas de la Unidad de Cooperativas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), dijo que los derechos humanos formaban parte del ADN de las cooperativas. Elogió al sector por su labor de lucha contra el trabajo infantil y el trabajo forzoso, la inversión en las comunidades locales y la formalización de la economía informal.
"Hemos visto que las cooperativas son actores estratégicos y clave a la hora de entablar el diálogo social", dijo, añadiendo que las cooperativas empoderan a sus miembros mediante la igualdad de derechos de voto sobre la base de un miembro, un voto. El año próximo ha sido declarado por la ONU como el Año Internacional de la Erradicación del Trabajo Infantil, y las cooperativas serán un actor clave en la sensibilización, añadió.
"Los derechos humanos en las cadenas de valor están vinculados a la violencia de género en el lugar de trabajo. Los derechos humanos también están vinculados a los principios cooperativos, lo que nos da un fuerte punto de partida", concluyó la miembro del Consejo de ACI Marjaana Saarikoski.